Santiago: mi querido Ipanema

Y finalmente caí inevitablemente por Santiago, como todo joven emprendedor. Ahora son las 7:34 pm. en un cyber, junto a un “Lentium I” que me tiene con urticaria atópica.Me las he caminado todas, casi me asaltan en el metro “militar!”, y por fin, luego de ver esa masa de gente iniciando su viaje de polo a polo, me baje en Padre Hurtado (gracias padre mío). Luego vienen las reflexiones: que carajo hago acá!, uta que es grande Santiago!, que mierda hago en el Parque Arauco?, Que dijo, Quilin???... Sin duda alguna lo bueno han sido los hot-dog “Italia simple” en el Domino´s, que me han salvado ni te cuento.
Luego de desistir de ir a dejar mi curriculum al hospital A. Hurtado (por que padre mío!), ubicado en la comuna de San Ramón (me recomendaron que ni de dia me asomara por ahí, por la crem “de traficantes” ubicados por sectores aledaños, por ej: La Pintana). Así que partí al metro “El salvador” a comprar un librito en la sede de la Universidad de Talca, por ahí por Quebec. Luego el libro de turno: “Isaac Asimov, compendio de cuentos tomo I”, uta que es bueno (a too esto considerado el padre de la ciencia-ficción).
Algo bueno de andar cesante (y con un poco de $$$) es que podi leer tranquilo, lo que siempre quisiste (por fin voy a leer Don Quijote como corresponde).
No puedo estar tranquilo, Me siento inmovilizado, de manos atadas, no se si ya necesito cambiar zapatos, por que me quedan caleta de hospitales que recorrer, bueno ya estoy tolerando esto de las secretarias que reciben tu curriculum y por detrás del mostrador lo tiran directamente a la basura, mi foto esta media borrosa, pero esto de sonreír y mostrarse sin duda es un “plus”, en teoría.
Bueno mañana me espera una visita ilustre por las aulas de Bello, así que quien sabe, capaz que termine haciendo clases, por ultimo de danza contemporánea (o guitarra criolla, leña, palo, etc.). Lo primordial, el trabajo dignifica al hombre, a este pueblo proletariado, que sin duda pertenezco de tiempos incipientes.